sábado, 19 de marzo de 2011

ADN del semen y calidad del ovocito

ADN del semen y calidad del ovocito

Domingo, 13 de marzo de 2011, Mireia Poveda García

Los efectos de la fragmentación del ADN del semen dependen de la calidad del ovocito.

En este estudio se ha analizado el efecto de la fragmentación de ADN espermático en los resultados reproductivos. Para ello, se han analizado 210 sémenes cuyas parejas se someten a ciclos de FIV-ICSI, tanto utilizando semen en fresco o congelado y ovocitos propios o de donante.

Con ello, se ha observado que la tasa de fragmentación del ADN no se ve alterada con la congelación del semen de forma significativa y que estos niveles no muestran diferencia después de realizar el swim-up. Con la utilización de ovocitos propios, se vio que si los niveles de fragmentación aumentaban, se observaba una disminución de la probabilidad de embarazo. En el caso de los ovocitos de donante, esta disminución fue menor pero no significativa.

Esto demuestra que el efecto de la fragmentación del ADN espermático no depende ni del origen del semen, ni del proceso de fertilización utilizado y que sus efectos pueden ser disminuidos por la capacidad reparadora de los ovocitos.

Marcos Meseguer a, Rebeca Santiso b, Nicolas Garrido a, Sandra García-Herrero a, Jose Remohí a, Jose Luis Fernandez b, c

a IVI, Universidad de Valencia, Valencia
b Sección de Genética y Unidad de Investigación, Hospital ‘‘Teresa Herrera,’’ Complejo Hospitalario Universitario A Coruña.
c Centro Oncológico de Galicia.

INTRODUCCIÓN

Se ha visto que la fragmentación del ADN espermático es un marcador de la calidad del semen y puede predecir el éxito de la fertilización ya que la integridad del ADN del gameto masculino es esencial para que se obtenga un embarazo exitoso.

La fragmentación del ADN del espermatozoide se produce como consecuencia de roturas no reparadas producidas durante el proceso de remodelación de la cromatina; también se ha visto que el estrés oxidativo puede inducir a elevar la fragmentación del ADN. Además, después de la eyaculación, la fragmentación del ADN va cambiando y se puede alterar por el manejo y procesamiento de la muestra.

Se sabe que el daño en el ADN espermático puede afectar a la fertilidad masculina disminuyendo la tasa de fertilización y es por ello, por lo que la determinación del nivel de fragmentación del ADN de los espermatozoides puede ser de mucho interés sobre todo en parejas con bajas tasas de fertilización, implantación o mala calidad embrionaria. Es por este motivo, por lo que se ha observado que la tasa de embarazo disminuye cuando el porcentaje de espermatozoides fragmentados es superior al 30%.

Sin embargo, para que la calidad embrionaria sea la adecuada y se consigan altas tasas de implantación es necesario, además de la integridad en el material genético del espermatozoide, la calidad ovocitaria. Por eso, la donación de ovocitos es una herramienta útil para poder estudiar la calidad del semen ya que reduce o minimiza los efectos de la infertilidad femenina, pudiendo así evaluar el efecto de la fragmentación del ADN en el proceso reproductivo. En este sentido, la ausencia de relación entre los niveles de fragmentación del ADN espermático y la tasa de embarazo puede ser explicado por la capacidad del ovocito a reparar los daños en la integridad del ADN del espermatozoide.

En este estudio, se ha cuantificado el efecto de la fragmentación del ADN espermático de muestras utilizadas para FIV-ICSI, tanto congeladas o utilizadas en fresco, en ciclos propios y en ciclos de donación de ovocitos.

MATERIAL Y MÉTODOS

En este estudio se ha evaluado un total de 210 parejas sometidas a FIV-ICSI. Los criterios de inclusión para el estudio fueron: pareja femenina con edades comprendidas entre los 30 a los 45 años, sometidas a un primer ciclo de FIV y con un Índice de Masa Corporal inferior a 30Kg/m2. La transferencia embrionaria de los ciclos estudiados se realizó siempre a las 72 horas tras la recuperación ovocitaria. Del estudio se excluyeron a aquellas mujeres con algún tipo de patología uterina, disfunciones endocrinas, abortos recurrentes y oligospermias severas.

Para evaluar el nivel de fragmentación del ADN espermático se utilizó el Kit comercial Halosperm. A las muestras de semen, tanto las utilizadas en fresco como las congeladas, se les realizaron el test de fragmentación antes y después de ser capacitadas mediante swim-up.

Se analizaron un total de 182 ciclos de ICSI y 28 ciclos en los que se realizó FIV. De ellos, en 112 se utilizaron ovocitos de donante y en 98 ovocitos de la propia paciente. En todos ellos, el embarazo clínico fue confirmado por presencia de saco gestacional con latido a las 7 semanas de embarazo. Se consideró aborto involuntario cuando el embarazo no llegó a la semana 22.

RESULTADOS

La edad media de los hombres incluidos en el estudio fue de 37,78 años y de las mujeres de 37,85. Los factores de infertilidad más frecuentes fueron en un 36,2% de los casos por mala calidad ovocitaria, edad materna avanzada en un 33,1%, insuficiencia ovárica prematura en un 10,6%, obstrucción tubárica en un 5%, baja respuesta ovárica en un 4,4% de los casos y factor masculino severo en un 3,1%.

En cuanto a los niveles de fragmentación del ADN espermático, se observó que la capacitación del semen por el método de swim-up reducía los niveles de espermatozoides con ADN fragmentado en el eyaculado. Esta mejora fue más significativa en las muestras de semen utilizadas en fresco que en las muestras congeladas y descongeladas. Por todo esto, se evaluó el efecto de la fragmentación del ADN espermático sobre los resultados reproductivos obtenidos si se utilizaban ovocitos propios o de donante.

Resultados con ovocitos propios.

En estos ciclos se observó que, en primer lugar, la tasa de embarazo no variaba si el semen utilizado era fresco o congelado. Tampoco existía variación significativa en los niveles de fragmentación antes y después del swim-up. Las tasas de embarazo no se vieron afectadas si se realizaba FIV o ICSI. Además, se observó que el proceso de fertilización, bien FIV o ICSI, no modificó los niveles de fragmentación

Con los resultados obtenidos, se relacionó los efectos de la fragmentación antes y después de la capacitación. En este caso, no se tuvo en cuenta ni si el semen era congelado ni si se había realizado FIV o ICSI. Con ello, se observó que por cada 10% de incremento de los niveles de fragmentación del ADN espermático, la probabilidad de no quedar embarazada aumentaba.

Resultados con ovocitos de donante

Al igual que con los ovocitos propios, en el caso de la tasa de embarazo no se veía variación significativa si se utilizaba semen en fresco o congelado. No se observó tampoco variación en el nivel de fragmentación de ADN espermático, antes y después del Swim-up. Ni una variación significativa en las tasas de embarazo tras realizar FIV o ICSI y los niveles de fragmentación no variaron tras realizar una u otra técnica.

Con los resultados obtenidos no se pudo determinar que en el caso de óvulos de donante, los niveles de fragmentación de ADN afectaran a la probabilidad de embarazo.

DISCUSIÓN

Los conocimientos en el campo de la mutagénesis han demostrado que, cuando el daño en el ADN es extenso, algunas lesiones son imposibles de reparar. La tasa de embarazo disminuye considerablemente cuando el ADN espermático está muy dañado ya que el ovocito es incapaz de reparar este daño. Además, se ha visto que la capacidad de reparación del ADN espermático está en función de la calidad del ovocito y por tanto, depende de la edad de la paciente, el entorno ovárico y del nivel de fecundidad.

En este estudio se ha analizado si el hecho de utilizar ovocitos de donante mejoraba la tasa de embarazo, en el caso de que los niveles de fragmentación del ADN fueran elevados, frente a utilizar ovocitos propios. Con ello se ha observado que el efecto de la fragmentación de ADN no depende del procedimiento utilizado para la fertilización y que estos niveles no afectan de manera significativa a la capacidad de fertilización del semen.

Además, muestra que el proceso de congelación-descongelación no afecta directamente a la integridad del ADN pero aumenta la susceptibilidad del ADN que puede ser dañado durante el proceso de preparación del semen para ser utilizado en las técnicas de reproducción asistida.

Por otra parte, se ve que la calidad de los ovocitos condiciona los niveles de fragmentación ya que no se detectó ningún problema en el caso de mujeres en edad fértil con ovocitos de buena calidad y es por ello, por lo que, a pesar de que la fragmentación del ADN influye negativamente en las tasa de embarazo, este problema también depende de la capacidad del ovocito de reparar este daño.

Por tanto, el efecto de la fragmentación del ADN espermático sobre la fertilidad tiene un efecto mixto ya que la capacidad de estos espermatozoides de producir embriones de adecuada calidad depende en gran medida de la capacidad reparadora del ovocito.

Fuente: Fertility and Sterility, vol. 95, nº 1, pp. 124-128, 2011